Piénsatelo. La vida no está hecha para llorar.

Por una lágrima, tres deseos y una sonrisa. 

La vida no está hecha para llorar, y menos para pasarlo mal. Piensa, que cada vez que sonríes, haces feliz a alguien. Piensa, que la felicidad tuya está en tus dulces y delicadas manos. El futuro, tu futuro, está en el aire, salta y cógelo. Abrázalo y ríe. Es lo único que puedes hacer para protegerte. Porque por mucho que no queramos, siempre habrá algo que nos haga llorar. Y no podemos impedirlo. De hecho no debemos hacerlo. Porque entonces es cuando realmente estamos cometiendo un error. Pero yo, yo lo único que quiero es sonreír. Qué más da. Es gratis. Es sencillo. Puedes levantar la vista y toparte con algo que te saque una sonrisa. Algo, cualquier cosa. Una foto, una persona, o un objeto; que más da. Algo que te haga recordar que eres feliz. Porque lo eres. Y eso es lo único que importa.